La reserva ecológica municipal “Sierra y Cañón de Jimulco”, es el área natural protegida creada con base en el acuerdo de declaratoria emitido el 27 de junio del 2003 por el cabildo del municipio de Torreón, Coahuila y publicado en la Gaceta municipal no. 10 del mismo mes. Comprende 60,458.26 hectáreas de superficie en posesión de ocho ejidos, mismos que dieron su anuencia para el acuerdo de declaratoria. La poligonal de la reserva ecológica abarca los ejidos de Juan Eugenio, Jalisco, La Trinidad, Jimulco, La Flor de Jimulco, Barreal de Guadalupe, Pozo de calvo y La Colonia, todos ellos pertenecientes al municipio de Torreón Coahuila (SEGOP, 2003).
La Reserva representa el área rural del municipio y corresponde al 44.7% del territorio de Torreón, es decir, casi la mitad de su extensión (incluyendo la zona boscosa y submontana más conservada de la región), cuenta con una protección especial sobre prácticas indebidas que puedan alterar contra sus recursos bióticos y por ende, mantener la funcionalidad ecológica de los ecosistemas. La reserva de Torreón “Sierra y Cañón de Jimulco” se declaró el 27 de Junio del 2003.
Desde la conocida extracción ilícita de plantas de desierto por particulares, pasando por la consulta comunitaria para ver la viabilidad de la Reserva, el reconocimiento de la riqueza biótica de la región y hasta la elaboración del plan de manejo, no se tenía clara la importancia biológica y cultural de esta zona aparentemente olvidada de Torreón.
La elaboración del plan de manejo por académicos-investigadores de diferentes disciplinas y con el apoyo de instituciones como WWF (World Wildlife Found, Fondo Mundial para la naturaleza) y pobladores del área, tuvo como fruto un documento- diagnóstico que actualmente rige y establece las prioridades a desarrollar.
Sin embargo, aquellas acciones establecidas como prioritarias, pretenden actualizar y robustecer el plan de manejo para hacer más eficientes las acciones de conservación y promover las actividades productivas factibles de desarrollo por los habitantes de la Reserva, conservando sus recursos y promoviendo el mejoramiento de su calidad de vida.
Así la mitad del territorio de Torreón es un área especial designada (en acuerdo con los ejidatarios, quienes mantienen sus derechos sobre la tierra) para la conservación de los ecosistemas y la promoción de estrategias de desarrollo para beneficio de sus habitantes, constituyendo la primer área natural protegida de ámbito municipal, en todo México (Padilla, 2008).
